De pequeño, Kevin tuvo una inclinación por la música. Su interés era tal que descuidaba otras asignaturas por estar concentrado en la música.
“Diría, más bien, que ocurrieron situaciones de manera fortuita que me dieron la intuición de que matemáticas era la carrera adecuada para mí. Por supuesto, fue una intuición que decidí seguir”, explica Kevin.
Kevin aprobó grado undécimo con éxito, pero nunca dejó de pensar que, a diferencia de otro compañero que destacaba en todas las áreas, le hacía falta bagaje tras haber descuidado algunas áreas. A partir de esa inquietud, empezó a estudiar matemáticas –“quizás por una ‘deuda a mí mismo’”, dice. La música le había dejado la disciplina suficiente para emprender ese nuevo estudio.
Al encontrarse con un libro de precálculo, con varias afirmaciones y sus respectivas pruebas, Kevin encontró satisfacción: “veía la forma en que un teorema, proposición o cual sea la afirmación matemática, se obtenía, a pesar que no sabía nada sobre lógica proposicional”. Por ese interés continuó estudiando y descubrió ideas que le llegaron a parecer “muy elegantes”. Finalmente, Kevin decidió estudiar Matemáticas en la Universidad Nacional, sede Bogotá.
Al terminar su pregrado, Kevin recibió un consejo de su directora de grado de pregrado, Carolina Neira: continuar con sus estudios de posgrado en la Universidad de los Andes, “para conocer nuevas personas y nuevos ambientes de trabajo, lo que a mi juicio es ahora uno de los mejores consejos que me han dado en mi vida profesional”, cuenta Kevin.
Siguiendo el consejo, decidió aplicar a la Maestría en Matemáticas en los Andes. Fue admitido bajo asistencia graduada. Pero, cuando ingresó, era la época pandémica y cuenta que tuvo dificultad para relacionarse con profesores y compañeros de manera virtual. El afán de conectar con otros nacía de la necesidad de vincularse a un proyecto de investigación lo antes posible; un requisito necesario para desarrollar su posgrado.
Mientras encontraba su camino dentro del Departamento en los Andes, buscó consejo de uno de sus docentes en la Nacional, Guillermo Rodríguez, quien le sugirió entender algunos problemas dentro de la rama de ecuaciones diferenciales parciales. Cuando Kevin se empezó a interesar por esa área, Rodríguez le recomendó trabajar con Jean Carlos Cortissoz, profesor del Departamento de Matemáticas de los Andes.
Durante su paso por los Andes, Kevin hizo nuevos amigos, fue profesor asistente y participó en un proyecto de investigación. Tener amigos fue enriquecedor a nivel personal y académico, pues el intercambio con otros le permitió conocer sobre otras áreas matemáticas y dar a conocer sus propios intereses. Por otro lado, en el proyecto de investigación, se valió de sus conocimientos y creatividad para trabajar en el problema de Navier-Stokes, uno de los
problemas del milenio. Cortissoz siempre estuvo apoyándolo en el desarrollo del proyecto e impulsándolo a trabajar con lo que ya tenía: “al fin y al cabo, cuando un matemático trabaja en un problema, las herramientas están ahí, pero solo la creatividad, que es como un músculo que se estimula y se fortalece si se ejercita, es la que sabe escoger cuáles de esas herramientas usar, siempre y cuando tenga la fuerza para usarlas”, dice Kevin.
Kevin comenta que su reconocimiento Cum Laude en la Maestría no sólo es para él; también se otorga “al potencial que tiene el Departamento de Matemáticas en el campo de ecuaciones parciales”. También considera que la distinción no es un fin último, sino que el proceso fue lo verdaderamente importante.
Ahora, espera empezar pronto su doctorado en Matemáticas, también en los Andes.
“Estoy seguro que aquí en Colombia también es posible hacer buenas matemáticas. En este caso, mi objetivo sería adquirir la pericia necesaria para que, en un futuro, pueda llegar a hacer parte de los profesores que motivan nuevas generaciones de matemáticos en el país”, dice.
También espera que, para poder continuar formando matemáticos en el país, se pueda obtener apoyo de distintos ángulos en el futuro; que los requisitos para ciertas becas no sean tan limitantes, o que los concursos docentes sean más justos.
Redes sociales